Me llena los ojos la melancolía.
Todo sentido desaparecía.
Soñé que él no era real,que era de pelicula,
que jamás había aparecido en mi vida.
Me asustó más que nunca.
Me esforcé por recordar cada cosa que
habíamos hecho juntos e imaginarme
cada tacto de sus manos.
Comprobé su existencia...
Y me desperté sana y salva.
Espero que cuando vuelva a surgir
la tristeza,no tendré que ir sola.
Sólo necesitaré apoyarme en tu pecho,
y te tomaré las manos,disfrutando de mi
soledad en tu mundo.
Poesía de una revista china.Anónimo.
2 comentarios:
Muy bonito... como un sueño...
mua!
Precioso y triste a la vez. Ya sabes lo que opino al respecto.
Caminante
Publicar un comentario